Perros guías que son los ojos de las personas

El sábado 19 de julio, Escuela para Entrenamiento de Perros Guía para Ciegos IAP ofreció un evento donde se festejó la graduación y jubilación de perros guías. Dicho acontecimiento se realizó en sus instalaciones en la CDMX, tuvo la presencia de la fundadora de la IAP, Silvia Lozada Badillo; además presentó actividades como un stand-up y discursos alusivos al tema central.

Escuela para Entrenamiento de Perros Guía para Ciegos IAP comenzó en 1988 con la iniciativa de Silvia Lozada, ella adquirió la discapacidad visual por una enfermedad a los tres años, pero decidió buscar alternativas, a los 13 comenzó a utilizar bastón blanco para desplazarse sola y a los 19 obtuvo su primer perro guía en Michigan. Tras fundar la primera escuela para perros guías en Latinoamérica en el 88’, en 1997 se inauguraron sus instalaciones y dieron paso a nuevos servicios.

Dentro de lo que ofrecen, destacan su Hospital Veterinario abierto al público y el Programa de Rehabilitación Inclusiva, además de las opciones brindadas para adoptar y donar perros.

El Programa de Rehabilitación Inclusiva funciona desde el 2006 con el objetivo de regresar su autonomía a las personas que sufran discapacidades visuales, ofrecen desde apoyo psicológico y orientación, lectura y escritura braille hasta uso de tecnologías y talleres.

El evento del 19 de julio se centró en celebrar la jubilación de un par de perros tras sus años de servicio, entre ellos estaba Kitty, quien era la perra guía de Silvia Lozada.

Igualmente, se invitó a un par de representantes de su programa de rehabilitación para que contarán experiencias y cómo funciona el programa, una beneficiada del mismo viajó hasta la capital mexicana y compartió que su vida se ha visto beneficiada enormemente, además que tiene mayor independencia desde que trabaja con su perro guía.

Así como Kitty se jubiló, también hubo graduaciones para algunos perros que ahora serán los ojos de las personas con discapacidades visuales.

Puedes entrar a la web oficial de la Escuela para Entrenamiento de Perros Guía para Ciegos IAP para tener más información de sus servicios, como lo son las adopciones o los requerimientos para solicitar a un perro guía.

La historia de esta IAP y de Silvia nos recuerda que una discapacidad no es sinónimo de inutilidad, además que los verdaderos límites nos lo ponemos cada persona.

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